Niklas Süle

El muro alemán que tiene atado el Bayern

Un central de los de toda la vida llegó al primer equipo del Hoffenheim hace ahora cuatro años. Con la mayoría de edad recién cumplida, desde el club de Sensheim se decidió que el chico que había llegado en edad cadete procedente del club de su ciudad, el Eintracht de Frankfurt, diera el salto a jugar con los 'mayores', aunque por su aspecto ya lo pareciera. Y es que el porte y la envergadura de Niklas Süle han sido sus mejores armas desde siempre para convertirse en un central no había hecho otra cosa que despuntar en las categorías inferiores del fútbol alemán. Su 1,95 metros y 89 kilos jamás pasaron desapercibidos, y para el Bayern de Múnich, que en enero lo dejó atado para la temporada que viene por 20 millones de euros, tampoco.

Pero no se dejen engañar por las apariencias, porque la de Nicklas lo hace. A simple vista, puede parecer un central lento que puede estar bastante limitado en defensas en bloque alto o que puede perder la espalda con facilidad, pero no es así. Aparte de eso, del juego aéreo y el dominio de las jugadas defendiendo en bloque bajo, Süle ha estado siempre tan cotizado y observado porque también es expeditivo, va bien al corte, tiene una salida de balón muy limpia y una zancada potente que le permite rectificar de manera correcta en situaciones de balones en largo a los extremos contrarios.

Es por esto, entre otras muchas razones, por lo que el Hoffenheim va cuarto en Bundesliga, invicto en toda la primera vuelta (lleva en total dos derrotas en el campeonato alemán) y segundo equipo con menos goles encajados en la competición tras el todopoderoso Bayern. También es por esto que el Bayern se ha adelantado a equipos como Liverpool, Chelsea o Manchester United para potenciar un eje de su defensa que ya de por sí cuenta con hombres como Boateng, Hummels o Javi Martínez, amén del cedido en la Juventus Benatia o el polivalente Joshua Kimmich.

Un fichaje por 20 millones que seguirá haciendo del equipo muniqués un auténtico invencible en Alemania y donde, quizá, con los títulos que en el Allianz va a ganar, Süle pueda sacarse la espinita que le dejó la plata en los JJ.OO. de Río 2016, en aquella final ganada por Brasil en los penaltis en el Estádio do Maracanã.

Kike Cervera (@kikecervera_)

Fotos: GettyImages, Reuters